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Bazar tradicional
Disfruta del mercado diario de Kukës desde el amanecer hasta la hora del almuerzo en el norte de la ciudad. Aquí encontrarás ropa tradicional auténtica como zapatillas bordadas a la perfección, comida y productos como manzanas, miel y nueces, la bebida de uva alcohólica albanesa llamada raki y artículos hechos a mano. Kukës también tiene una fábrica de alfombras y fabricantes de alfombras por toda la región, así que podrías encontrar una ganga en una tradicional tejería del bazar. El bazar de Kukës es el mercado más grande de la región, así que es el centro de los productores agrícolas de los alrededores para vender sus mercancías. La estación de minibús está situada convenientemente cerca del bazar, por lo que puedes acumular tentempiés antes de que salgas a hacer un viaje de senderismo de montaña o a la frontera de Kosovo. Dirígete a uno de los cafés que hay por la zona después de tus compras para probar algunas de las especialidades comestibles de Kukës: panecillos rellenos de col y delicioso pan sin levadura frito.
La reserva Fierze y el lago Koman
Cuando la vieja Kukës fue abandonada debido a la presa hidroeléctrica construida en el río Drin Blanco en los años 70, la ciudad se inundó y ahora está habitada por los peces de la reserva Fierze. Cuando el agua está baja y clara, cuentan que desde algunos ángulos se puede entrever la antigua ciudad bajo el lago. Las asombrosas orillas de la reserva son un lugar popular para disfrutar del sol, nadar durante los días de verano e ir de picnic con vistas al fondo de las montañas ondulantes. Por desgracia, Albania tiene un problema de basura, por lo que las orillas de la reserva a veces están un poco sucias. La reserva se puede ver desde algunos de los hoteles de la ladera, convirtiéndose en un escenario espectacular al atardecer. Si eres de los que quieren disfrutar de un poco más tiempo en las aguas albanesas, puedes realizar el espectacular tour de dos horas en ferry al lago Koman desde Fierze a Koman. Los acantilados rocosos cubiertos de hierba se alzan sobre el lago, cosa que también fue creada por el proyecto de hidroelectricidad de Fierze. Fierze está a unas horas en coche al norte de Kukës y no está muy lejos del Parque Nacional del Valle de Valbona.
Parque Nacional del Valle de Valbona y Alpes albaneses
Los hermosos Alpes albaneses y el tranquilo Valle de Valbona están situados a 122 kilómetros al noroeste de Kukës, unas cuantas horas en coche más allá de la frontera con Montenegro. La zona es parte de un parque internacional compartido con Montenegro y Kosovo, donde puedes disfrutar de la pura belleza natural de los Alpes. Los senderistas pueden acampar en la naturaleza gloriosa por el río Valbona de color azul glacial, descubrir la deliciosamente fresca ( y orgánica) comida local incluyendo la miel proveniente del tomillo que crece por todo el valle y disfrutar de la hospitalidad de la pequeña aldea de Valbona. Aquí, serás bienvenido en las casas de los locales. Fíjate en los tradicionales edificios albaneses, tales como los antiguos molinos de agua y los puentes de piedra. Los cabreros pastorean con sus cabras que pastan sobre los verdes prados, las flores silvestres colorean las laderas, peñascos dolomitas surgen del río Valbona y las nubes pasean por las montañas. Probablemente veas jabalíes, salamandras negras y amarillo fuego en los días húmedos, nutrias y si tienes suerte, al oso pardo europeo. Este es realmente un paraíso para los amantes de la naturaleza. Algunas empresas turísticas proporcionan tours guiados de la zona del Valle de Valbona, haciéndolo todo más fácil ya que proporcionan traducción, transporte hasta el valle y se aseguran de que estés en el sendero correcto ¡y no siguiendo un camino de cabras!
La montaña Gjallica
La montaña más alta de la región de Kukës es un lugar pictórico para senderistas ansiosos, con sus picos nevados y bosques de hayas. El pico de Gjallica está a unos 2.500 metros sobre el nivel del mar y ahí ves Kukës y el lago Koman a vista de pájaro, así como los Alpes albaneses en el Parque Nacional del Valle de Valbona. La montaña es principalmente de dolomita y caliza, y empieza en frondosas laderas cubiertas de hierba, transformándose en bosques alpinos y creciendo en dolomitas rocosas y picos de caliza. Es mejor estar bien preparado ya que no hay instalaciones en la montaña, así que el aprovisionamiento de comida, agua y tienda de campaña es la mejor manera de asegurarte de que disfrutas de tu caminata. Las mejores rutas hasta la cumbre están cerca de la vieja mina de cobre a unos cuantos kilómetros a las afueras de Kukës o bien pasando las pictóricas aldeas alpinas de Brejke y Topojan. Es mejor hacer senderismo en grupo ya que hay algunos linces, lobos grises y osos pardo europeos alrededor de los Alpes Dináricos, a los que pertenece la montaña Gjallica. El número de estas especies ha disminuido debido a la interferencia humana, así que aunque es muy raro ver alguna, ¡que se dejen ver es una experiencia emocionante!
El Museo de la Liga albanesa de Prizren
En el lado kosovar de la frontera de la ciudad Prizren, encontrarás el Museo de la liga albanesa de Prizren, donde descubrirás la historia etnográfica y política de los albaneses, bosnios y turcos de la región. Aquí tuvo lugar en 1878 la primera reunión de la Liga de Prizren para colocar diplomáticos y luego peticiones militarmente forzadas para la autonomía de Albania del Imperio Otomano. Las demandas no se cumplieron y la ciudad permaneció ocupada en primer lugar por los otomanos y después por los serbios, el Imperio austrohúngaro, búlgaros, formando al final parte de la Yugoslavia serbocroata. Muchos de los líderes de la Liga de Prizren fueron encarcelados o fusilados durante una reacción violenta por parte del Imperio otomano después del asesinato de un diplomático turco. Durante los últimos años de los 90, los edificios del museo fueron en gran parte destruidos por las fuerzas ocupacionales serbias, sin embargo, han sido completamente reconstruidos. En el complejo del muso de cuatro edificios verás arte patriótico, bustos de los miembros de la Liga, fotos históricas, un traje tradicional albanés conocido como xhubleta y sombreros tradicionales albaneses. No hay subtítulos en inglés en el museo pero hay una colección de cartas y documentos escritos en inglés por testigos expatriados de la Liga Prizren. La entrada al museo es muy barata.
La mezquita Sinan Pasha
Tan solo a menos de una hora en coche desde Kukës, cerca de la frontera kosovar está la ciudad histórica de Prizren. Camina por el viejo puente de piedra y descubre las mezquitas e iglesias de la ciudad. La Mezquita Sinan Pasha fue construida en 1615 por los otomanos con piedras rescatadas que cogieron de un monasterio en ruinas. Entra a través del asombroso tríptico de cúpulas y arcos para descubrir los hermosos frescos de flora e inscripciones del Corán dentro de la cúpula principal. La mezquita aún se usa para rezar hoy en día, así que es mejor comprobar con los locales las horas de plegaria y recordar quitarte los zapatos antes de entrar.
Shishtavec
La aldea de Shishtavec se asienta en lo alto de una meseta sobre el Vanave Gorge, a una o dos horas en coche. La zona contiene una riqueza de fascinaciones geológicas por explorar, desde hermosas montañas rocosas, cuevas naturales, cascadas y zonas fantásticas para barranquismo. Los locales son sumamente receptivos y hay varias casas de huéspedes en las que alojarse para descubrir la comida albanesa de montaña. En verano puedes explorar los bosques de abedul y acampar en los seductores pastos verdes de las tierras altas y en invierno hay oportunidades para esquiar. A menos que tomes el minibús desde Kukës, necesitarás definitivamente un vehículo de cuatro ruedas para conducir por la carretera hasta Shishtavec.
La casa de Isa Kurpali
Debido a las novelas de Ismail Kadare, Albania es conocida por sus torres de la cuneta conocidas como kulla, que han ofrecido históricamente santuario para aquellos involucrados en reyertas familiares de acuerdo con las leyes tradicionales conocidas como Kanun. En la aldea de Letaj puedes visitar una torre de tres pisos construida en los años 1800. Su impresionante estructura tradicional de piedra no tiene ventanas en el primer piso. Una escalera que había en el interior permitía a los hombres involucrados en reyertas familiares subir al siguiente piso y retirar la escalera, asegurándose su seguridad durante el tiempo que permanecían dentro. Con frecuencia, sus mujeres e hijos les traerían comida y agua. Las torres como Kurpali Kulia representan una parte tangible de la historia cultural y frecuentemente sangrienta albanesa.
Valle de Valbona
Aunque hay un largo viaje desde el Valle de Valbona hasta la ciudad de Kukës, vale la pena realizarlo por el ambiente prístino y natural con el que te encontrarás. Acampa en los campos verdes, pasea o da una vuelta en bici por la montaña y alójate en las casas de huéspedes de la Albania rural donde te servirán comida tradicional como el asado. Con vistas hacia los picos nevados de las montañas, el rápido río Valbona y la antigua piedra y casas techadas con paja, el Valle de Valbona es un sueño para todo fotógrafo. Puedes incluso esquiar durante la temporada de invierno, pero necesitas contar con un sentido de la aventura y llevarte tu propia tienda de campaña ya que no hay ningún albergue ni telesillas.
Redactor :
Marion Rouillot
